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Síntesis de nuestro pensamiento
Nuestra organización es un partido de orientación Marxista-leninista, definiéndose también como Guevarista, en el sentido de ser el Guevarismo la mayor expresión del Marxismo-leninismo en América Latina.
''Fuentes ideológicas''
Reivindica la lucha de todos los marxistas leninistas y se considera parte de la corriente ideológica que en nuestro país encarnó el Partido Revolucionario de los Trabajadores histórico con Mario Roberto Santucho a la cabeza. Reconoce que, en lo elemental, su ideología fue desarrollada por Karl Marx, Friedrich Engel y Vladimir Lenín. No sigue las desviaciones de los trotskystas ni de los stalinistas pero recoge el aporte de revolucionarios como León Trotsky, Mao Tsé-tung, Ho Chi Minh, Ernersto Guerava, Mario Roberto Santucho.
Reconoce como primer intento de formar un estado obrero a la Comuna de París, y a la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) como primer experiencia en la que el proletariado organizado, con sus aliados de clase, toman el poder.
''Situación política''
En la actualidad, lejos de estar en una situación prerevolucionaria, estamos en una situación de reflujo o decaída de las masas, por lo que la primera y más importante misión es la reconstrucción de las organizaciones de nuestro pueblo para elevar el nivel de conciencia de las masas.
La derrota de la URSS es una derrota de toda la clase, un retroceso objetivo. Pero tal derrota presenta como causas principales el atraso ideológico de las masas rusas y la política contrarrevolucionaria que siguió el Partido Comunista de la URSS (PCUS) bajo el mandato de Joseph Stalin. La caída del bloque soviético y la derrota del proletariado organizado en todo el mundo han causado un reflujo del que aún nuestra clase no ha salido.
La burguesía, como clase, ya ha dado todo lo que podía por desarrollo del modo de producción capitalista, hoy es una clase reaccionaria. La OR 19 cree que ha llegado la hora del proletariado que debe organizarse en partido proletario marxista leninista y, haciéndose cargo de su rol de vanguardia, acaudillár al resto del pueblo, orientándolo políticamente, debe tomar el poder y aniquilar a la burguesía como clase.
“Proletariado”
El proletariado es el conjunto de los trabajadores asalaridos. Como clase, luchan contra la burguesía en el proceso que se llama “lucha de clases”. A veces, reivindicando los intereses históricos de la clase, de modo conciente, como expresión política revolucionaria, cuando se organizan en Partido Proletario Revolucionario. Otras veces, reivindicando intereses inmediatos, de modo menos conciente, como expresión de una política burguesa y reformista, el sindicalismo. No subestimamos a la clase, no pensamos que nuestros compañeros son estúpidos, sólo analizamos objetivamente las causas que llevaron al reflujo de masas y tratamos de intervenir para cambiar esa situación. Un compañero se evalúa por su práctica primero, por su análisis de la situación política después, y el mejor compañero es el que combina la ambos valores de la mejor manera.
“La Clase Obrera”
La clase obrera es el SECTOR DEL PROLETARIADO (o sea, una parte del proletariado) que produce MERCANCÍAS. Nuestro PRIMER objetivo es conquistar a los obreros. Pero no por eso desatendemos a otros sectores sociales. Como dice Lenín, llevamos nuestra propaganda a TODA la sociedad, incluidas la pequeñoburguesía y, según las circunstancias, la burguesía.
También podemos y debemos organizar a los estudiantes, sin desatender a los obreros. Pero la política en el campo estudiantil, como en el sindical es reformista. Con un Frente amplio que agrupe a todos aquellos que quieran transformar la realidad.
La burguesía es la clase dueña de los medios de producción que compra la fuerza de trabajo del proletariado.
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Segundo documento de discusión
¿Movimiento o Frente?
LA CONSTRUCCION DEL PARTIDO REVOLUCIONARIA Y EL MOVIMIENTO DE MASAS SON NECESIDADES DE NUESTRA REVOLUCION
Muchas veces se ha planteado la dicotomía: ¿qué es más urgente construir, movimiento o partido? Y muchos han respondido: o bien que es más importante construir el núcleo dirigente de la revolución: el partido, que unirá a la masas en un amplio frente; o bien, que es mejor formar el frente de masas del que surgirá el partido y el programa a partir de valorar quiénes son sus militantes más consecuentes, valientes y forjados para la lucha.
Si nos preguntan a nosotros, debemos decir que ambos son importantes y debemos comenzar a construirlos desde ahora mismo a ambos.
¿FRENTE O PARTIDO?
Debemos partir para todo análisis, de las condiciones objetivas en las que se encuentra nuestro pueblo, para este también. Nuestra clase tiene dos problemas fundamentales a resolver para alzarse en revolución: uno, que no tenemos dirección política, otro, que estamos profundamente dispersos. Es una tarea urgente de nuestra militancia que comencemos a romper estas barreras. Partido y Movimiento (o Frente) tienen una respuesta que dar a ambos fenómenos. Cada uno tiene una virtud y un defecto del que el otro carece. Por un lado, podemos decir que el partido separa, lo que el movimiento une, por el otro, que el movimiento carece de la unidad y dirección política que el parido tiene.
PARTIDO
No tenemos dirección política porque muchos de los grandes dirigentes del presente están sumidos en un vedetismo egocéntrico y/o en una política reformista que nos llevaría, de seguirlos, a otra frustración más: hemos quedado huérfanos de dirigentes experimentados. Así, los militantes más convencidos de la necesidad de la revolución para solucionar todos los problemas que aquejan a nuestra clase debemos organizarnos en Partido Revolucionario, para orientar el proceso general de la revolución: el partido (sus militantes) debe “leer” lo que pasa políticamente en el mundo, la región (Latinoamérica) y el país para sintetizar los fenómenos políticos y, a partir de ahí, dar un política clara en los sectores donde el partido active. Debemos formarnos en la teoría marxista leninista para no desviarnos de las tácticas y estrategias revolucionarias más pertinentes en cada etapa, debemos leer las noticias internacionales y nacionales y darles una interpretación propia, con la visión de nuestra clase, para desde ahí, generar y propagar la línea política más adecuada a esta etapa de la revolución en nuestro país. Sólo así lograremos la unidad, la consecuencia y la combatividad que la Revolución requiere.
MOVIMIENTO
El otro de los dos grandes problemas que delimitamos es la profunda dispersión en la que está sumido nuestro pueblo a partir de la derrota de los 70 y de la consiguiente destrucción de las organizaciones de masas o, si nos las destruyeron, su vaciamiento de bases (como en los sindicatos). Por lo tanto, es urgente también que tengamos la visión agudizada, y que sepamos que cada persona es distinta a la otra, que muchos sectores de nuestro pueblo no están en condiciones de militar en un partido porque su nivel de conciencia aún no ha llegado hasta ese punto de compromiso; pero que aún así, pueden darle algo a la Revolución. Sólo debemos ver cuáles son las condiciones, aspiraciones y deseos de quien tenemos al lado, verlo en todas sus potencialidades. Algunos podrán luchar en el terrenos sindical, o intelectual o artístico o estudiantil, etc. A ellos también debemos tratar de orientarlos políticamente y organizarlos de algún modo. La PRIMERA tarea que tenemos como revolucionarios es la de unir lo disperso. Para todos ellos, tenemos prevista la conformación de Frentes de Masas, que aún no se han constituido pero que tenemos que fomentar.
